Todos los testamentos otorgados ante notario se registran en el Registro General de Actos de Última Voluntad.

Se trata de un registro público por el que, con la presentación del correspondiente certificado de defunción y previo pago de la tasa correspondiente, se puede conocer si una persona otorgó testamento en vida, en qué fecha y ante qué notario.

Este registro, sin embargo, no guarda constancia de otros actos de última voluntad que podrían revocar o modificar los testamentos que sí constan inscritos, tales como testamentos o codicilos hológrafos, o memorias testamentarias.