La Ley establece que los funcionarios actuantes extenderán diligencia de cada actuación que realicen y que no se impondrán obligaciones a las empresas para adquirir o diligenciar cualquier clase de libros o formularios para realizar estas diligencias.

Cada ejemplar de la diligencia se deberá conservar a disposición de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social durante un plazo de 5 años.